top of page

Tama fue un compañero de camino .... 

 

Todo empezó gracias a Tama y a una "noche oscura del alma" que el destino trajo para exigirme una mayor comprensión. Duró los años suficientes para conocer otras formas de aprender y descubrir otras capacidades innatas que desconocía.

 

En esa época, la dificultad de comunicación con el ser humano empujaba a buscar nuevos canales de comprensión.

​

“Hablando” un día con Tama, fiel compañero de cuatro patas, tuve la sensación que respondía con una voz sin palabras que nos conectaba desde el alma. Me impactó, y quedé cohibida. Tama en silencio, respetó el tiempo que pedía mi miedo para asimilar la experiencia.

 

Investigué en distintos campos con las limitaciones que impone "la noche oscura", y no hallando respuesta, una llamado interior venció el miedo permitiendo otras formas de experimentar.

 

Despacio y con respeto, un día Tama expresó su mensaje: "Esencias"... Yo las tomaba pero no entendí el significado en ese momento. Me dejé guiar por el instinto, puse unas gotas en la mano, se la acerqué, y las lamió.

 

Estábamos juntos las 24 horas del día, sufría mi proceso y aun siendo un cachorro somatizaba mi estado. La intuición llevó a tratarlo con las esencias que yo tomaba… ¡Sorpresa, Tama mejoraba más rápido que yo!... Con el tiempo descubrí el motivo; el filtro racionalista. Yo quería curarme, mientras Tama no lo pretendía y simplemente se curaba. Él mejoraba más rápido porque no se hacía preguntas... Él mejoraba y yo mejoraba a través de él.

  

Un día, decidió que ya podía caminar sola y se marchó. No hubo despedida porque no fué necesario.

​

 

Tama me mostró el camino a las esencias florales y otras técnicas terapéuticas adecuadas para los animales, y me ayudó a reconectar con el lenguaje universal que nos une a todos los seres vivos: La comunicación entre especies.

 

Tama fue comprado. En ese momento de mi vida usaba abrigos de piel, cada cumpleaños me regalaba bañarme con delfines en cautividad y comía carne... Los animales me gustaban pero no tenía ninguna conciencia animal.

 

Son seres sintientes y con emociones. 

 

Desde que tomé conciencia, he dedicado mi vida en cuerpo y alma a la defensa del bienestar animal respetándolos como se merecen.  

 

                ... Gracias Tama.

 

Llegaron más maestros de cuatro patas. Todos ellos me mostraron el camino de la conciencia y empatía animal. Desde Tama hasta Tristán han pasado más de 20 años… Soy vegana y activista. Ya no hay vuelta atrás.

 

A todos ellos, y a los que sigan llegando, dedico el proyecto:

​

                                                          TAMA´S ESSENCES  al servicio del Reino Animal

  • Facebook
  • Twitter
  • Youtube
  • Instagram
bottom of page